RECORDANDO A LA MINERIA EN SU PATRONA SANTA BARBARA
Apuleyo Rodríguez, Pule, estaba en la cama cuando le fueron a buscar. Era miembro de la Brigada de Salvamento de Casetas. Había salido a las ocho de la mañana de trabajar. Cuando entraron a reconocer la mina con los brigadistas de Hulleras de Sabero sólo pudieron rescatar a algunos compañeros. Los demás estaban muertos.
Si Raquel Rodríguez no le hubiera grabado hace cinco años, la primera vez que se enfrentó a la tragedia de los 14 de Casetas, hoy no contaría con su valioso testimonio. Ya falleció. Ahora su voz se suma al coro de mineros supervivientes, huérfanos, hermanos de los fallecidos, vecinos y la única viuda que, sesenta años después, reconstruyen con sus recuerdos desde el momento de la explosión que estremeció al valle aquel mediodía de junio de 1954 hasta las penurias y la solidaridad que ayudó a salir adelante a las catorce familias golpeadas por la tragedia, sin indemnizaciones y con el sustento perdido.
Doce féretros (dos mineros murieron en el hospital) uno detrás de otro desfilaron por las calles abarrotadas de este pueblo minero que concitó con este luctuoso suceso la mayor aglomeración de gente vista en sus calles.
Delfina, la viuda de Egesipo, el maquinista, oyó la explosión desde su casa de La Ercina, pero no se imaginaba lo que había ocurrido. Venía de un pueblo agrícola y «ese día comprendió lo que era la mina». Su hija, María Edén, tan sólo tenía dos años. Otros estaban en camino y alguno ya trabajaba en la mina. Corría el 10 de junio de 1954. La tragedia dejó 34 huérfanos. Catorce mineros perecieron en uno de los accidentes mineros más graves de la historia. Ocurrió en Las Casetas de Oceja, el barrio que surgió aledaño a las minas de don Esteban Corral en la cuenca de Sabero.
Valentín de la Varga estaba en el seminario mayor de León y por la noche le comunicaron que un hermano había muerto en el siniestro. No le dijeron el nombre. Tenía tres hermanos mineros. Al día siguiente compró el primer periódico de su vida. En la esquela vio el nombre de Ramiro.
Las víctimas tenían entre 21 y 54 años. Sus nombres son: Evaristo Ferreras Díez; Francisco Córdoba García; Ramiro de la Varga García; Jesús Sánchez González; Esteban Fernández de Prado; Leonardo Tascón González; Antonio Félix Rodríguez; Trinitario Rodríguez Sánchez; Roberto Díez Pérez; Egesipo Sánchez Gutiérrez; Cesáreo García González; Nemesio Sánchez; Adolfo Sánchez y Delfín Ríos.
Aquilino Valbuena era entibador en El Peñón y escuchó la explosión dentro de la mina mientras comía el bocadillo. Después de salir se dirigió a la bocamina de La Única para ayudar en el rescate. Máximo Álvarez estaba en el economato. Tenía que entrara la una a domar un buey. Su compañero Ramiro se adelantó y pereció en el accidente, al igual que su cuñado, Delfín. Daniel Tascón, otro de los mineros jóvenes entonces, perdió a su padre, Leonardo...
Y así una historia detrás de otra, salen de las escenas mudas de la memoria de la mina y se convierten en memoria viva de una tragedia que cobra actualidad con el fin de la minería, como apunta el escritor Julio Llamazares. «Ahora que la minería se está terminando la historia de los 14 de Casetas está más viva que nunca», afirma el escritor Julio Llamazares en la introducción del documental.
La joven cineasta, oriunda de La Ercina, leyó con 15 años Escenas de cine mudo, el libro en el que escritor recorre sus años vividos en Olleros de Sabero. «Me encantó y se me ocurrió pedirle que me dejara utilizar algún párrafo. Fue increíble. Desde el principio quiso participar y me ha ayudado muchísimo», resalta la joven cineasta.
Raquel Rodríguez tuvo la primera noticia de la tragedia en el año 2004, cuando los mineros fallecidos fueron homenajeados en el municipio en el 50 aniversario de la tragedia. Después se fue a Burgos a estudiar Comunicación Audiovisual y, en 2009, se propuso hacer un trabajo de memoria. Pronto se dio cuenta de que carecía de «los medios y los conocimientos necesarios» para afrontar el proyecto. A finales del año pasado, el Ayuntamiento de La Ercina le propuso retomar el proyecto con motivo del 60 aniversario. El verano pasado el pueblo vio el documental en primicia en dos sesiones en las que vecinos y foráneos abarrotaron el salón de actos de la casa consistorial.
«Fue emocionante. Ver que la gente de tu tierra te felicita y está contenta es increíble, porque tenía miedo de hacerles daño, no quería reabrir heridas», comenta la directora, que ha contado con el trabajo de un equipo de profesionales (Álvaro González, Mario Alaguero, Mario Calzada, Blanca Casla y Lucía Tamayo) y con la ayuda de expertos en minería como Leoncio García.
Ahora ha incorporado como novedad textos de Escenas de cine mudo y la voz de Julio Llamazares. Mañana, coincidiendo con la fiesta de Santa Bárbara, patrona de los mineros, se estrena Los 14 de Casetas en el Museo de la Siderurgia y la Minería (MSM) de Sabero con la presencia de la directora y muchos protagonistas.
Día: Jueves 4 de diciembre Lugar: MSM de Sabero Hora: 18.00
Raquel Rodríguez tenía cinco años cuando cerraron Hulleras de Sabero. Su padre fue uno de los mineros que perdió el empleo aquel mes de diciembre de 1991. Para ella el ambiente minero es un recuerdo lejano. Difuso.
«Los 14 de Casetas me ha ayudado a conocer más mi zona y a comprender a la gente», admite. Es su primer documental y le ha despertado las ganas de hacer más cosas en la comarca.
Estudió en Burgos y en Madrid, donde reside. «Aquí a los 16 o 17 años sabes que tienes que ir en algún momento y en mi caso para hacer lo que quería hacer era imprescindible», comenta. Tiene claro que tras el cierre de las minas «no se ha sabido reciclar toda esta tierra. Todo es economía y gente que ha trabajado tanto se ha quedado sin nada del día a la noche y ha tenido que emigrar». Un problema que ahora se propaga más allá de las cuencas.
ANA GAITERO PERIODISTA
miércoles, 03 de diciembre de 2014 a las 8:28
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OBSERVACION
Que yo sepa nunca ha sido imputado -salvo excepciones conocidas de Jueces separados hoy del servicio por condena judicial- un Presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial. Sobre un Presidente anterior cayó en un momento -justificada o no- la "sombra" de la sospecha, pero dimitió y nunca fué imputado. Precisamente las imputaciones de políticos de los dos grandes partidos se deben a la actuación independiente y responsable de los Jueces y Magistrados, sometidos únicamente al imperio de la Ley. Y no es, ésta, afirmación personal, es que lo dice la Constitución.
Manuel Domínguez Viguera
martes, 02 de diciembre de 2014 a las 11:42
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OPINION DE ANSON
AL AIRE LIBRE LA FISCALÍA NO SE ATREVE CON JUNQUERAS
La maquinaria de la Justicia está en gran parte paralizada en el País Vasco. Los alcaldes, ediles y representantes políticos de los partidos proetarras hacen lo que les viene en gana sin temor a la sanción judicial. Los casos Gürtel, Malaya y un largo etcétera se multiplican en la parte del País Vasco dominado por los proetarras sin que nadie se atreva a denunciar ni las mordidas ni las comisiones ni las recalificaciones ni las licencias de obra ni los patrocinios ni las subvenciones ni la contratación a dedo de personal.
Que semejante despropósito se extienda a Cataluña sería lamentable, cuando se sabe, porque Pascual Maragall lo denunció en el Parlamento, que el partido en el poder se bene-ficiaba al menos del 3% de las obras públicas contratadas. Ahora resulta que el nepotismo desaforado de Oriol Junqueras en beneficio de una empresa dirigida por su hermano Roger cuesta Dios y ayuda investigarlo y no encuentra más que obstáculos de todo tipo.
La presunta prevaricación de Oriol Junqueras al favorecer a su fraterno produce rubor. La relación de Cespa -cinco empresas de las que el hermano de Junqueras es apode-rado- está llena de irregularidades y oscuridades. Oriol Junqueras era concejal y luego alcalde de San Vicente dels Horts hace tres años. El proceso de licitación y adjudicación del servicio de recogidas de basuras en favor de Roger Junqueras ha sido denunciado por el Sindicato Manos Limpias y no ha encontrado más que obstáculos para que se conozca la verdad. Oriol Junqueras tapa sus vergüenzas envuelto en la bandera estelada del indepen-dentismo pero la gente quiere transparencia y claridad. A ver si resulta, como ha ocurrido en otros casos en Cataluña, que Oriol Junqueras forma parte de la caravana de la corrupción y el descarado nepotismo. Luis María ANSON de la Real Academia Española
martes, 02 de diciembre de 2014 a las 10:53
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