Recursos
Se ha suscitado, en el caso NOS, la impugnación por la acusación popular "Manos Limpias" del acuerdo del Juez Castro sobre la citación del testigo Marcos Teijeiro, antiguo Contable de la la Fundación "sin ánimo de lucro", encabezada por Urdangarín y Torres, a quienes considera como únicos responsables de todos los hechos delictivos imputados hasta el momento, excluyendo a las respectivas esposas. Se trata de judicializar lo manifestado por el aludido Teijeiro en el escrito que ha dirigido recientemente al Ministerio Fiscal. Yo creo que el Juez de Instrucción, no obstante encontrarse en trámite diversos recursos de apelación contra el Auto de transformación de las Diligencias en Procedimiento Abreviado, puede y debe mantener la declaración acordada. Y me baso en los arts.223,225 y 766 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal. El art.223 dice que "interpuesto recurso de apelación el Juez lo admitirá en uno o ambos efectos, según sea procedente". Cuando lo admite en un solo efecto, mantiene su competencia para seguir conociendo, por lo que, para sustanciar el recurso, manda deducir testimonio de determinadas actuaciones que será el remitido al Tribunal superior, quedando el proceso en el Juzgado, acordándolo así conforme previene el art.225. Pero es que, además, el art.766 que se refiere concretamente al procedimiento abreviado -parece algo de "coña" mantener esta denominación para un proceso en que las diligencias previas se prolongan durante años....- dice "1.-Contra los autos del Juez de Instrucción y del Juez de lo Penal...... podrá ejercitarse el de REFORMA y el de APELACION, salvo que la Ley disponga otra cosa..." "Los recursos de reforma y de apelación no suspenderán el curso del procedimiento". No creo, pues, que tenga base el escrito de "Manos Limpias" pidiendo al Instructor que deje sin efecto lo acordado respecto de la declaración citada.
Manuel Domínguez Viguera
lunes, 07 de julio de 2014 a las 19:35
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OPINION DE ANSON
FÉLIX SANZ, ADELANTE
Ha sido hombre clave en la operación sucesoria en Don Felipe. Su información certera, su capacidad para la negociación, su sabiduría en el consejo determinaron a Juan Carlos I a abordar el proceso de abdicación. Ha hecho bien el Gobierno Rajoy en mantenerle al frente de los servicios de inteligencia. Felipe VI y el Rey padre se beneficiarán de la experiencia del general Sanz Roldán.
Tengo, por cierto, el mejor concepto personal del director del CNI. Es hombre de ideas muy claras, firme en su defensa, flexible en la conversación, sagaz en el análisis. Destaca por su prudencia y su espíritu de conciliación. Es amable y cordial y tiene conciencia clara del alcance de sus funciones tan claves en el Estado de Derecho. Su lealtad a la Corona, por otra parte, carece de fisuras entre otras razones porque está asentado en el respeto a la Constitución que la voluntad general libremente expresada del pueblo español refrendó en 1978. Entre tantas noticias alarmantes, entre tanta incertidumbre producida por los órdagos secesionistas, tranquiliza saber que al frente de los servicios de inteligencia permanece un hombre prudente, experto y leal. Una suerte para Felipe VI y una suerte para España.
Luis María ANSON de la Real Academia Española
lunes, 07 de julio de 2014 a las 9:09
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TRES MESES
Después de trabajar en la revisión de mi libro, que seguro tendrá muchos errores, he conseguido mandar lo que me quitaba el sueño, unas anotaciones, en la prueba en PDF que la editora me había mandado. Cuando hoy al conectar el ordenador e miré que me habían mandado un e-mail, diciendo perfecto me salió de la cabeza una nube cargada de impotencia por mi ignorancia. Lo que escribo e público, construyó un muro como lo de Berlín que dividía las dos Alemanas, con mi familia, la poca que tengo. Nunca lo aceptaran. Quizá alguien se ha retratado en alguna cosa que he escribido. Problema ajeno a mi verdad, sin nombres, se lo hizo es porque lo he puesto bien. Lástima que algunos no acepten lo que son, problema de ellos. Aquí sentada, mirando mi balcón con floreras amarillas y flores rosa anaranjado, con el regador amarillo también, colgado en la pared, con una vista fabulosa de la ciudad de Oporto e escribiendo al sonido de mi música no me acuerdo del muro, para nada. En lo poco que la vida me ha dado, soy en este momento casi, casi, feliz. Si no pienso en mi edad aún más soy. Quitando las temporadas en que estuve enferma e mucho, nunca estuve parada, pero me doy cuenta que me falta hacer y gozar mucho. Si la gente supiera como estropean sus vidas intentando no dejar vivir los demás, seguro que pensarían dos veces, antes de hacerlo. El olvido ya vendrá, siento que a cada día que pasa, ya no pienso tantas veces en lo que me han hecho pasar. Es bueno. Con mui poco, tengo mucho, como la inmensidad del mar, no puedo decir la cantidad que llevo en mi corazón en este momento. Plenitud de paz, cortada por sorpresas menos buenas, que pasan. Mismo temiendo por la salud de mi compañero, en este momento, quizá exagerada todo saldrá bien así confío en Dios. Mi ignorancia me hace temblar un poco, pero va a recuperar, una deficiencia de nacimiento Una válvula que no cierra bien en el corazón. Mañana es el día que pasará por el hospital e volverá, para junto de mí. El merece lo mejor, pues mejor persona no puede ser. Percances, todos tenemos, está sereno, yo echa un nervio. Disfrazo, ni hablo en nada, intento tenerlo ocupado para que haga lo que tiene que hacer en el hospital con serenidad e confianza. Mañana por esta hora ya todo ha pasado, lo creo e deseo. Dios lo vigilará lo sé. Quedo confusa cuando a quien tengo cariño, tenga que hacer algo que no entiendo, en hospitales. Es ignorancia de mi parte, confieso mi desconfianza. ¡Una hormiga se transforma en elefante! Hace tiempo que nada tengo publicado, mucho que hacer en mi casa, no hablando en el trabajo que he tenido para publicar mí libro, que no quedará bien de todo, eso seguro. Gramática, e traducción, bueno ya está hecho, como emigrante, que soy, sin tener estudios del castellano, he optado por el internacional. Que lo entiendan, que sientan lo que escribí, el perdón me darán. Seguro.
Oporto 19 de Mayo de 2014 Carminha Nieves
viernes, 04 de julio de 2014 a las 15:34
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A VIDA ÉMUITO E NADA
Tudo acaba. Devagar, sem pensarmos, ficamos sem coisas, que julgávamos ser parte da nossa vida. Já há muito tempo, fui dando conta que não temos nada, a não ser nos próprios. O que nos rodeia, rompe-se, perde a cor brilho, como se uma traça gigante e invisível desfizesse tudo. Repomos outras novas em seu lugar, mas não são iguais. O que acabou, acabou e nunca voltaram. Só somos nós, que também acabamos, por ser uma lembrança para alguns bons, para outros indiferente e indigesta para muitos. Somos como o dia da Mãe, do Pai, da mulher, de tudo, somente um dia e nada mais. Somos a paisagem que desaparece quando nos afastamos, somos o vento que passa, o poema que se esqueceu, algo que fez falta, a mão que segurou alguém para não cair. Somos o ventre que gerou, mas nunca temos direitos, somos o trapo velho que deixamos cair no pátio do vizinho de baixo e que vai para o lixo. A ilusão também acaba, quando damos uma revisão ao deve e haver do que fizemos. È sempre prejuízo. Nunca somos pagos, dívidas eternas que nos prejudicam. Somos o que precisam, mas nunca o que precisamos. Somos o dar, sem receber. Não devia ser assim, mas não sabemos enquanto não precisamos que por justiça recebamos o que nos é devido. Melhor seria não pensar, ser indiferente, oca, fria e egoísta. Pisar firme e calcar tudo e todos. Passar sem ver pela miséria dos outros, sofrimento, carências, só andar de cabeça erguida sem olhar. Sermos reis, poderosos, na mesquinhez da frieza do nosso ego. Somente existe, a paga, que o destino nos dá. Mais tarde ou mais cedo, pagamos com juros muito altos o mal que fazemos. Não me lembro de ninguém que me tenha prejudicado que não tenha dado contas e que contas pelo que me fizeram. Não sinto alegria, mas a cada um o que merece. A vida somos nós, ela acaba e junto acabamos também. Passagem efémera, se tivéssemos presente sempre o insignificante que somos, outra maneira de viver teríamos. Por muito larga que seja a estrada, se andamos em contra mão, esbarramos com alguém. Podemos não morrer, mas iguais não ficamos. No nosso corpo ficam marcas para sempre e o remorso também e este é terrível. Nascer é igual para todos, mas não somos iguais. Alguns já trazem o sofrimento de não poderem andar, com doenças tremendas, outros perfeitos fisicamente trazem a alma doente. O princípio pode ser bom, o fim tremendo. Ou o contrário. Reflectir, faz bem. Muito se evitava se nos cingíssemos à insignificância do que somos O orgulho é bom quando o temos por sermos rectos humanos e humildes. O prazer também, se vem do sentido do dever cumprido. Com honestidade e humildade sejamos simplesmente iguais a todos, com defeitos e virtudes. Um tremor de terra pode arrasar centenas de casas por pequeno que seja, se não tiverem bons alicerces. Um grande pode não arrasar nada se a base for solida. Está em nossas mãos alicerçarmos, as bases das nossas vidas, nunca nos esqueçamos, que por muita beleza, riqueza, poder, o nosso interior pode estar deteriorado e somos derrubados por um sopro de má sorte. Tentemos ser a fortaleza onde se podem refugiar os mais carentes seja qual for as suas carências.
Porto, 3 de Julho de 2014 Carminha Nieves
jueves, 03 de julio de 2014 a las 12:27
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