Angel Barja cumpliría 75 años...
El próximo 5 de octubre Angel Barja cumpliría 75 años. Todavía viven con su misma edad, personas en Terroso, Florderrey, Vilardevós, Arzádigos... y en el extranjero. Que la Plaza de nuestro querido Terroso nos recuerde, al menos en estos días, lo mucho que ha dado a conocer a nuestro pueblo en todo el mundo donde se interpreta su música. Un saludo para todos. José Barja
domingo, 29 de septiembre de 2013 a las 22:37
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¡¡Sus...!!
Todo es así de sencillo... Pon tu mano en el bolsillo para amarrar bien los cuartos que, seguro, estamos hartos de que mande tanto pillo. Anteayer compré un cepillo para rascarme los dientes, porque con sólo un palillo por mucho más que lo intentes jamás le puedes dar brillo. En este mundo loquillo, en el que manda el dinero o consigues ser jilguero, ese hermoso pajarillo con la voz de un caramillo... o te quedas sin puchero. Si te estafa algún vecino, pone pies en polvorosa y no piensas otra cosa que cobrárselo al cretino; mas si te estafa el gobierno y te esprime en lo más tierno por la fuerza de sus leyes ¡tira tu carro y los bueyes... y los mandas al infierno!
viernes, 27 de septiembre de 2013 a las 19:16
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No... no
No quiero darte la vara. Me enfrento cada noche con los granos de mi cara delante del espejo, (detrás es imposible); percibo que hay un viejo que se hace el invisible, y me meso los tres pelos de mi barba, pues si fueran más de tres no sería ya mi barba. Los dos pelos del cogote, como antenas de un marciano se disputan al enano de un piojo mal nacido, borrachín y divertido, que se pasa allí el verano... ¡Al final se muerde un ojo y el muy tonto queda cojo! Cuando niño... yo era un niño que contaba las estrellas y salían burbujitas en la punta de la lengua. ¡Va por ellas! Me reía a rompernueces tal que un loco sin fronteras, como harías tú si cueces tres manzanas con seis peras.. ¡Muy travieso... y con razón! Mais agora, que vou vello, sempre dediante do espello, ríome e digo: "¡Lambón!"
miércoles, 25 de septiembre de 2013 a las 20:24
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Lluvia radiactiva
¡Me da que va a llover chorizos! Ayer me pasé por los Juzgados, en una visita rutinaria para presentar mis respetos semanales a los defensores de las leyes (una especie de guardia civil que se encarga de que se cumplan y si no las cumples te dan el martillazo) y tropecé con centenares de sacos, repletos hasta el lacito de atar, de algo pesado, alargado, retorcido, con olores diversos, como es la cebolla, la calabaza, la guindilla (una vasca y otra del Empordá), algo de aceituneros de Córdoba, "lejana y sola, jaca negra, luna grande"... que llegaría hasta Cádiz por volverse honubense. ¡Y yo que lo piense! Sin pensarlo mucho me acerco al amable representante del arco detector de metales a la entrada del edificio y le inquiro por el contenutto de las sacas del correo del transiberiano. Como era de esperar de su amabilidad no me contestó, antes al contrario me preguntó... "¿Lleva algo metálico con usted..?" "Sí, amable cuidador del arco iris, tres muelas de platino forradas en oro y un fémur de acero inoxidable. Ah, y mil euros en monedas de un céntimo para pagar una multa por usar la energía solar mientras vendimiaba moras por los caminos". "¡¡Eso no es de mi incumbencia!! ¡Circule o lárguese a freir puñetas!" "¿Y a quién le pido yo un quilo de puñetas para freírmelas con patatas fritas y unos espárragos trigueros?" "¡¡¡A la madre superiora, coño!!!". Viendo que la cosa se deslizaba hacia la religión, a la que tododiós le echa la culpa de cuanto acontece de malo en el mundo por lavado de cerebro, me colé en la fiesta como pude. "Y allí me colé y al momento presencié..." Llegan dos azafatas, con minifalda hasta el límite del orinoco, acompañadas por un bigotitos esmirriado con camisa de seda y se la queda... se la queda mirando, a la azafata porque no hace otra cosa que frotarse las piernas con fuerza para que no se le escapen las bolas chinas que lleva en su tienda de interiorismo desde las siete. Y cuando una bola se mete... tiende a salir. Bueno, volviendo a lo que decía fray Bartolomé de las Casas... de las casas salen los que antes entraron, a no ser que se mueran y haya que sacarlos, como nos pasará a la mayoría de los presentes que pueda morirse a cubierto, que, tal como van las cosas, tengo mis dudas. Dudas aparte, el de la corbatita colombiana, con lagarto pintado a la acuarela, o sea el bigotitos, saca una tijera del paquete que una de las azafatas porta y la trasporta al cuello de la primera saca. Luego saca un boligrafo y boligrafía lo que el viento se llevó... La gente se arremolina curiosa por ver la faena. Mira si habrá gente en la reunión que llega desde Cuatro Caminos a la Queca de Henares, que para los que no sean de Madrid equivale a desde Santurce a Bilbao, que viene siendo toda la orilla. Al cortar el lacito de marras aparece un junco, señal de que allí hay chorizada. Efectivamente, el uno repleto de morcillas, el dos de mortadelas con aceituna (una, que es Oviedo), el tres con cecina castellana con la típica mancha del quijote, el cuatro repletito de butifarra con un suave toque de campana de barco pirata y por fin la requinta saca abarrotada de todo tipo de salchichas, humanas unas, perrunas la mayoría. El bigotitos se limpia las manos a la falda de una de las veintisiete azafatas que fueron arribando a puerto y sin decir verbum escribió en un papelito del tamaño de una servilleta de bar cutre: "La última palabra la tiene el juez"... De seguido desfila toda la comitiva oficial y se queda el anfiteatro vacío. Pasa una carretilla, recoje las sacas y se mete en el montacargas camino del subsótano sesenta y ocho, en donde se almacena todo el material radiactivo proveniente de la política caducada. ¡La de ratas que habrá allá abajo, a donde ni la luz se atreve a llegar por miedo a encontrarse con los moNSTRuos! En fin, parece que se retira la borrasca y vuelve el anticiclón. ¡¡¡Jaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaajajaaaaaaaaa! ¡Hay que ser retorcido para hablar de chorizos! Si es mucho más fácil ir al super, birlarlos al estilo "lávate-las-manos-después-de- robar-para-que-no-te-pillen", asarlos en el monte para que el olor se confunda con el humo de los incendios y... tararí que te vi pero no me acuerdo. ¡Mañana nos vemos en el senado con las manos más limpias que nunca!
viernes, 13 de septiembre de 2013 a las 17:35
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