Santa María de Mixós-Monterrey
 Santa María de Mixós
La iglesia de Santa Maria es una construcción de fines del siglo IX, de tipo asturiano con elementos mozárabes. Es muy interesante su cabecera debido a sus tres ábsides de planta cuadrada por fuera tiende al arco de herradura en su interior. Hay restos de pinturas murales que representan al salvador y a los evangelistas. Dos aras romanas sirven de base al altar mayor y al de la capilla del evangelio.
Iglesia levantada en el siglo X en una zona muy romanizada, por lo que se sospecha que la comunidad cristiana estuviera asentada en este lugar mucho antes.
Aparece mencionada en un documento del siglo XII en el que es donada al monasterio de Celanova, que disfrutaría de ella hasta que, en el siglo XVI, fue vendida al conde de Monterrey.
Su traza original respondía a un esquema basilical de tres naves separadas mediante arquerías de herradura y cabecera triple de ábsides semicirculares muy profundos que, al exterior, son rectos.
Hoy en día la nave es diáfana y se cubre con una techumbre de madera a dos aguas (la ausencia de contrafuertes exteriores indica que la original también era asÍ), mientras la zona de la cabecera, conserva prácticamente intactos los tres ábsides con sus respectivos arcos de triunfo de herradura.
Es, por tanto, un edificio en el que se unen las tradiciones anteriores, visigóticas y asturianas, con los nuevos aires de mozarabismo traídos durante la repoblación de la zona.
En su interior se conservan murales, dicen que de la Edad Media, aras romanas y algunas imágenes interesantes. por su importancia artístico-histórica. En su cabecera destacan tres ábsides de planta cuadrada, arcos de herradura y bóveda de cañón. Detrás de un retablo barroco, hoy sustituido por un cristo crucificado, destacan pinturas murales (siglo XII-XIV) que representan el Padre Eterno sosteniendo al Hijo crucificado.
Santa María, era más conocida como Virgen de la Leche, por favorecer a las madres y a los animales lactantes.
El visitante que hoy se acerque hasta la iglesia de Santa María se encontrará un templo de nave única cubierta con madera y una cabecera triple de ábsides con planta semicircular y rectos al exterior.
Basta con fijarse detenidamente para saber que la realidad del proyecto original era distinta y contemplaba un esquema basilical de tres naves separadas por arquerías de herradura, como demuestra el arranque de un arco conservado entre el ábside central y el del lado de la Epístola. También se especula con la posibilidad, y así parecen refrendar las excavaciones, de que existiesen dos cámaras en el primer tramo de las naves, flanqueando la entrada.
Los ábsides se cubren con bóveda de cuarto de esfera realizada en ladrillo, y arrancan de una imposta de dientes de sierra que es el único motivo ornamental del templo. Estos tres ábsides se comunican con el exterior gracias a otros tantos vanos asaeteados de extrema sencillez.
La cubierta de madera, que por supuesto no es original, si podría haber sido utilizada en la primitiva fábrica, puesto que, a pesar del grosor de los muros, la no existencia de refuerzos exteriores no hubiese podido soportar el peso de bóvedas pétreas.
Del exterior destacaremos el aparejo que presenta, en el que se mezclan sillares regulares muy bien cortados y mampuesto de distintos tamaños, lo que se explicaría por las diversas reformas sufridas. Esta disposición no se repite en la cabecera, que, como en el interior, es la zona que ha permanecido menos alterada.
Como dato curioso que nos habla de la romanización de la zona, es que para los altares se reutilizaron algunas aras romanas.
La iglesia de Santa Maria es prerrománica, siglo IX-X, con reminiscencias mozárabes ,visigóticas y asturiano.Es muy interesante su cabecera debido a sus tres ábsides, de planta cuadrada por fuera, tiende al arco de herradura en su interior. Hay restos de pinturas murales que representan al Salvador y a los Evangelistas. Dos aras romanas sirven de base al altar mayor y al de la capilla del evangelio.
En la lápida sepulcral del muro situado en el exterior de la iglesia.
según cuentan los vecinos, se trataba de un monje que vivía hace ya muchos años en una casa cerca de la iglesia.
En la iglesia, anterior a la del castillo, ejemplar cu¬rioso de traza románica con factura mozárabe, hay unas aras romanas que vienen a estudiar los ar¬queólogos y unas pinturas medievales bizantinas que yo entreví lo que dura un fósforo. Creo, sin embargo, que con romanos, godos o árabes, con Monterrey o con quien fuere, Mijós no ha dispuesto nunca de sus propios bienes y ha variado poco en veinte siglos.
Fue declarada monumento histórico-artístico en 1931.
En este lugar existió un monasterio de monjas benedictinas. Fue donado al monasterio de Celanova.
El templo parroquial de Mixós es de planta basilical (originariamente de tres naves) y con tres ábsides, los laterales rectangulares y el central cuadrado, con una ventana cada uno. En su fábrica se observan diferencias entre los sillares de menor tamaño y asentados en un podio y los más voluminosos del resto del templo; en los muros laterales se observan modillones que quizá fuesen los soportes de la tribuna que asentaría sobre una pequeña cámara. En el interior, dos aras y pinturas del siglo XIII y XIV. La iglesia fue reconstruida en los siglos XV y XVI.
Prerrománica, del siglo X, mozárabe y con elementos visigóticos. En su interior se conservan murales, dicen que de la Edad Media, aras romanas y algunas imágenes interesantes. por su importancia artístico-histórica. En su cabecera destacan tres ábsides de planta cuadrada, arcos de herradura y bóveda de cañón. Detrás de un retablo barroco, hoy sustituido por un cristo crucificado, destacan pinturas murales (siglo XII-XIV) que representan el Padre Eterno sosteniendo al Hijo crucificado.
Santa María, era más conocida como Virgen de la Leche, por favorecer a las madres y a los animales lactantes.
Igrexa levantada no século X nunha zona moi romanizada, polo que se sospeita que a comunidade cristián estivera asentada neste lugar moito antes.
Aparece mencionada nun documento do século XII no que é doada ó mosteiro de Celanova, que gozaría dela ata que, no século XVI, foi vendida ó conde de Monterrey.
A súa traza orixinal respondía a un esquema basilical de tres naves separadas mediante arquerías de ferradura e cabeceira triple de ábsides semicirculares moi profundos que, ó exterior, son rectos, cunha ventá cada un. Na súa fábrica obsérvanse diferenzas entre os perpiaños de menor tamaño e asentados nun podio e os máis voluminosos do resto do templo; nos muros laterais obsérvanse modillóns que quizais fosen os soportes da tribuna que asentaría sobre unha pequena cámara. No interior, dous aras e pinturas do século XIII e XIV.
A igrexa foi reconstruída nos séculos XV e XVI.
Atópase declarada monumento nacional.
El templo parroquial de Mixós es de planta basilical (originariamente de tres naves) y con tres ábsides, los laterales rectangulares y el central cuadrado, con una ventana cada uno. En su fábrica se observan diferencias entre los sillares de menor tamaño y asentados en un podio y los más voluminosos del resto del templo; en los muros laterales se observan modillones que quizá fuesen los soportes de la tribuna que asentaría sobre una pequeña cámara. En el interior, dos aras y pinturas del siglo XIII y XIV.
La iglesia fue reconstruida en los siglos XV y XVI. .sobresale, por su importancia histórico-artística, la iglesia pre-románica (S. IX-X) con reminiscencias mozárabes y visigóticas. En su cabecera destacan tres ábsides de planta cuadrada, arcos de herradura y bóveda de cañón. Detrás del Cristo se pueden apreciar pinturas murales (s. XII-XIV) que representan al Padre Eterno sosteniendo al Hijo crucificado, acompañados de figuras del tetramorfos.
En sus comienzos se documenta como un cenobio de monjas dependiente de Celanova. Más tarde, la iglesia fue regentada por los Mercedarios. De antigua devoción es la dispensada a Santa María, más conocida como Virgen de La Leche, por favorecer a las madres y a los animales lactantes intercediendo en el momento del parto.
A primeira mención documental desta igrexa data xa dos tempos do rei Afonso VII, que en 1155 dooulle este templo ó Mosteiro de Celanova. Santa María de Mixós, situda en Monterrei, data do século X e consta dunha planta de tres naves rematadas noutras tantas capelas con pechamento de ferradura na cabeceira. Trátase da segunda e última igrexa galega do século X.
Nun principio foi mosteiro de monxas. Os expertos sitúan esta igrexa a carón dunha antiga vía, por esta razón o asentamento dunha comunidade cristiá neste lugar remontaríase ós tempos da dominación romana, con continuidade nos séculos seguintes , tal e como indica Ramón Yzqueiro Perrín nun volume sobre arte medieval galega.
A forma de ferradura deste templo tense vencellado con reminiscencias mozárabes e visigodas.
Cada unha das ábsidas da igrexa conta cunha bóveda de ladrillo que lle fai de cuberta e que se converte tamén en punto de partida dunha decoración en dentes de serra dispostos diagonalmente. Éstes responden a un carácter funcional, servindo de apoio, pero tamén posúen valor estético como ornato.
Esta decoración aparece tamén noutras edificacións como sucede nos beirados dos presbiterios de San Miguel de Celanova e de Santo Antoíño de Toques.-
Igrexa levantada no século X nunha zona moi romanizada, polo que se sospeita que a comunidade cristián estivera asentada neste lugar moito antes.
Aparece mencionada nun documento do século XII no que é doada ó mosteiro de Celanova, que gozaría dela ata que, no século XVI, foi vendida ó conde de Monterrey.
A súa traza orixinal respondía a un esquema basilical de tres naves separadas mediante arquerías de ferradura e cabeceira triple de ábsides semicirculares moi profundos que, ó exterior, son rectos, cunha ventá cada un. Na súa fábrica obsérvanse diferenzas entre os perpiaños de menor tamaño e asentados nun podio e os máis voluminosos do resto do templo; nos muros laterais obsérvanse modillóns que quizais fosen os soportes da tribuna que asentaría sobre unha pequena cámara. No interior, dous aras e pinturas do século XIII e XIV.
A igrexa foi reconstruída nos séculos XV e XVI.
Atópase declarada monumento nacional.
Ventanas en el ábside de la iglesia prerrománica de Santa María de Mixós, cerca de Verín. Se erigió en el siglo IX, con reminiscencias visigóticas y mozárabes. Dependió del monasterio de Celanova y en el siglo XIII pasa a ser vendida al Conde de Monterrey, a quien le pertenece hasta el siglo XVI.
Es una iglesia muy interesante, ya que pese a sus ábsides cuadrados tiene en su interior profundas capillas en el presbiterio con tendencia al arco de herradura. En su interior se hallan dos aras romanas que sirven de pedestal, una a la imagen de la Virgen, y la otra como altar del Crucificado.
O templo parroquial de Mixós é de planta basilical (orixinariamente de tres naves) e con tres ábsidas, os laterais rectangulares e o central cadrado, cunha ventá cada un. Na súa fábrica obsérvanse diferenzas entre os perpiaños de menor tamaño e asentados nun podio e os máis voluminosos do resto do templo; nos muros laterais obsérvanse modillóns que quizais fosen os soportes da tribuna que asentaría sobre unha pequena cámara. No interior, dous aras e pinturas do século XIII e XIV.
A igrexa foi reconstruída nos séculos XV e XVI. .
Xunto a esta xoia arquitectónica atopámonos a uns tres quilómetros do castelo, en Mixós, a igrexa prerrománica de Santa María, do século X, mozárabe e con elementos visigóticos. No seu interior se consérvanse murais da idade media, aras romanas e imáxes interesantes.
A primeira mención documental desta igrexa data xa dos tempos do rei Afonso VII, que en 1155 dooulle este templo ó Mosteiro de Celanova. Santa María de Mixós, situda en Monterrei, data do século X e consta dunha planta de tres naves rematadas noutras tantas capelas con pechamento de ferradura na cabeceira. Trátase da segunda e última igrexa galega do século X.
Nun principio foi mosteiro de monxas. Os expertos sitúan esta igrexa a carón dunha antiga vía, por esta razón o asentamento dunha comunidade cristiá neste lugar remontaríase ós tempos da dominación romana, con continuidade nos séculos seguintes , tal e como indica Ramón Yzqueiro Perrín nun volume sobre arte medieval galega.
A forma de ferradura deste templo tense vencellado con reminiscencias mozárabes e visigodas.
Cada unha das ábsidas da igrexa conta cunha bóveda de ladrillo que lle fai de cuberta e que se converte tamén en punto de partida dunha decoración en dentes de serra dispostos diagonalmente. Éstes responden a un carácter funcional, servindo de apoio, pero tamén posúen valor estético como ornato.
Esta decoración aparece tamén noutras edificacións como sucede nos beirados dos presbiterios de San Miguel de Celanova e de Santo Antoíño de Toques
La iglesia de Santa María de Mixós, Estevesiños, construida a finales del siglo IX, es de tipo asturiano, con influencia mozárabe. Fue declarada monumento histórico-artístico en 1931.
En este lugar existió un monasterio de monjas benedictinas. Fue donado al monasterio de Celanova.
Un documento de 1025 habla de Muisiolus y su monasterio. El nombre evoluciona a Moxous en 1155 quedando posteriormente como Mijós. Allí hubo un monasterio menor de la Galicia altomedieval. Era de monjas benedictinas que pasó a depender de Celanova en el siglo XII. Hoy vemos su iglesia, bello ejemplar con 14 metros de longitud y 7,8 metros de anchura. Consta de dos accesos desde los siglos XV y XVI pero sin duda que la cabecera es la parte de mayor interés.
El profesor Manuel Núñez asegura que la planta de esta construcción demuestra un conocimiento de la última arquitectura asturiana. El edificio era una basílica de tres naves. Sus tres ábsides son rectangulares siendo el central algo más cuadrado.
Las investigaciones hacen suponer que la iglesia tuvo tres naves separadas por dos pilares de base cuadrada a cada lado. Sobre éstos habría capiteles sencillos y dichos pilares estarían conectados por tres arcos formeros que bien podían tender a la herradura. Es probable que la nave mayor tuviese más altura.
Los ábsides se cubren con bóveda de ladrillo y llevan una curiosa decoración en dientes de sierra a la altura de las impostas. Los arcos absidiales arrancan de una imposta de moldura sencilla, de influencia asturiana. Los pilares entre los ábsides disponen de sillares en soga y tizón. La cabecera luce tres saeteras en arco de herradura salvo la de la nave de la Epístola.
Algunos autores dicen que sólo la cabecera es prerrománica. Del castillo insiste en una reconstrucción habida en el siglo XVI. Los sillares de la cabecera son más pequeños, no así los de la nave por lo que se aprecia una discontinuidad y el interrogante de si fue Mixós reformado en el siglo X o después.
Rivas Fernández cree que la iglesia tiene elementos por lo menos de los siglos VI ó VII.
domingo, 17 de mayo de 2009 a las 23:15
Enviado por kiko rolán
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