LA HUMILDAD SALVA DE LA LEPRA A NAAMÁN.
Naamán era un pretigioso general del ejército sirio del siglo X a E.C. durante los reinados de Jehorám de Israel y Ben-habad de Siria, y muy apreciado y respetado por su caracter de altos principios y por el favor que gozaba por su éxitos militares, uno de los cuales, por medio de Jehová logró la salvación de Siria.
Naamán que se encontraba aquejado de lepra le llegó la grata noticia saber que podía curarse de esa repugnante enfermedad. Este noticia le llegó a través de una muchacha israelita que era sclava de su esposa y que durante una invasión había tomado cautiva. La jóven le comentó acerca de la existencia de un profeta de Samaria que podía curarlo de la lepra.
Naamán partió de inmediato para Samaria provisto de una carta de presentación de Ben-hadad II. Pero el rey isrelita Jehorám lo recibió con abierta frialdad y sospecha. De modo que no llegó a recibirlo personalmente sino que a través de su siervo le recomendó que se bañara siete veces en el rio Jordán, Herido y humillado en su orgullo, y al parecer pensando que se le habia enviado de un lugar a otro sin miramientos y además sin resultados positivos, se marchó enfurecido. Si sus sirvientes no le hubieran hecho ver lo razonables que eran las instrucciones que habia recibido, hubiera vuelto a su país aún leproso. Pero al final obtó por bañarse siete veces en el rio Jordán, donde la obediencia y humildad de Naaám hicieron quedase milagrosamente limpio de la lepra. Naamán fue el único leproso curado mediante la intervención de Eliseo. (2ª Reyes 5.1.14; Lucas 4:27)
Naamán, se hizo adorador de Jehová, y rebosante de gratitud, humildad reconocimiento, el jefe del ejército sirio volvió a Eliseo para ofrecerle valiosos regalos que el profeta rechazó insistentemente. Posteriormente Naamán pidió que Dios lo perdonara. Después de su marcha el codicioso siervo de Eliseo, Guehazí, lo alcanzó, y mediante mentiras le hizo creer que Eliseo había cambiado de opinión y finalmente aceptaba algunos regalos. Naamán con mucho gusto le regaló plata y vestiduras. No obstante la mentira y la ambición de Guehazí lo perdió resultando castigado de lepra con toda su familia
sábado, 30 de octubre de 2010 a las 18:42
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¿ESPIRITUALIDAD CON CILICIO?
Luís IX rey de Francia, llevaba un cilicio, Tomás Moro, político inglés también lo utilizó algún tiempo para estar despierto durante ciertas horas cuando estudíaba la carrera de derecho, y cuando Tomás Becket, arzobispo de Canterbury, fue asesinado se descubrió uno bajo sus ropas. ¿Que hacía que estos pesonajes recurrían al cilicio?.
El cilicio es una práctica ascética de mortificaión corporal con una gran tradición en los religiosos y aunque no son peligrosos para la salud , los santos de la iglesia lo han practicado. Originalmente, el cilicio consistía en una vestidura ruda de piel de cabra o de camello que iba ceñida al cuerpo y servía como un verdadero instrumento de penitencia. Desde el siglo XVI , el pelo de cabra o camello se ha sustituido por un fino alambre con púas dobladas hacia la carne para causar más tormento al portador.
Según parece el propósito del silicio, al igual que otros artfactos de mortificación, era para servir de freno a la carne ingobernable y fomentar el el desarrollo de una personaliad más espiritual. No solo los ascetas utilizaban estas vetiduras, sino también la clase laica, entre ellos quienes ocupaban puestos de alto rango. si bien todavía quedan algunas órdenes religiosas que siguen esta costumbre.
¿Puede el cilicio o cualquier otra forma de privación física voluntaria lograr que una persona sea espiritual? No, la espiritualidad no depende de de estas prácticas. El apóstol Pablo condenó el "tratamiento severo del cuerpo" (Colonenses 2:23) La verdadera espiritualidad se obtiene únicamente buscando el conocimiento exacto de Dios, mediante el estudio diligente de su Palabra y aplicándola a nuestra vida.-
viernes, 29 de octubre de 2010 a las 12:16
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PARA EVITAR EXPONERSE AL ATAQUE DE LA INMORALIDAD.
Es evidente que los distintos medios populares de entretenimiento, rodean y atacan a los jóvenes con lo que menosprecia lo que es decente y enaltece lo que es obviamente inmoral. Además de las muchas películas de cine de terror, de guerras violentas, canciones con explícito contenido sexual y programas de televisión que excitan y exhaltan las relaciones sexuales ilícitas, se añaden otros medios como la publicidad en prensa de los lugares donde abundan anuncios que conducen al vicio y a crasa podredumbre.
Mi estimado lector, ¿puedes exponerte a estas descripcines del bajo sumidero de disolución? y, a la vez mantenerte limpio ante nuestro Padre Celestial?. (1ª de Pedro 4:4) No, como lo muestra el Proverbio citado. La presión que se ejerce sobre ti para que pierdas tu limpieza ante Dios viene también de otra fuente: otros jóvenes. A nadie le gusta que se rian de el, es normal pretender que se nos acepte. Pero puede que los jóvenes se burlen de ti porque defiendes con firmeza los normal morales bíblicas.
El deseo de ser como tus compañeros y de que ellos te acepten puede ejercer en ti para que hagas algo que sabes que es incorecto y que luego te vas a arrepentir.-
jueves, 28 de octubre de 2010 a las 20:29
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CONVERSANDO CON MI AMIGO DAMIÁN.
Carta a mi amigo cubano Damián Herrera: Después del último correo que te envié, me permito añadir, que para que Dios te oiga, como también a todos nosotros los creyentes, tenemos que expresar en oración, pensamientos que estén en armonía con la voluntad devina; debemos ser sinceros en las peticiones que le hagamos, pero se requiere más que eso, se requiere, ante todo fe, como indica el libro bíblico a los Hebreos capítulo 11 versículo 6 que dice: "Sin fe es imposible serle de buen agrado a Dios porque el que se ecerca a Él, tiene que creer que existe y que llega a ser remunerador de los que le buscan solicitamente".
Pués bien, ¿puede animarse a personas no creientes a orar con la esperanza de que Dios los oiga?. El rey Salomón, consciente de que la oración es un privilegio que se da solo a algunos, pidió a Dios que oyera únicamente a los exgranjeros que oraran hacia el templo de Dios en Jerusalén.(1ª de Reyes 8:41-43). Siglos más tarde, el extranjero gentil llamado Cornelio, centurión de la compañía llamada Italiana, muy temeroso de Dios con toda su casa, que hacía muchas limosnas al puebo y dedicado constantemente a orar a Jehová Dios, recibió de Ëste, el Espírtu Santo de forma que Cornelio y otros gentiles se bautizaron (Hechos 10:1-44)
Amigo Damián ,tal como en el caso de Cornelio te recomiendo que con tu eposa e hijo, oreis frevorosamente siempre a Dios, a traves de su mediador Jesucrito (1ª Timoteo 2:5) para que tomeis el camino correcto que os lleve hacia la dedicación a Nuestro Padre Celestial.
Difinitivamente Damián, nosotros por tener conocimiento exacto de la Palabra de Dios, tenemos una gran esperanza como podemos leer en Revelación 21:3,4,5. Abrazos.
miércoles, 27 de octubre de 2010 a las 20:03
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EL PROVECHO DE LAS ESCRITURAS
En la segunda carta a timoteo capítulo 3 versículo 6 el apóstol Pablo comenta que: "Toda Escritura es inspirada de Dios y provechosa para enseñar, para censurar, para rectificar las cosas, para disciplinar en justicia". Estas significativas palabras que identifican a Dios, cuyo nombre es Jehová, es el autor de las Sagradas Escrituras.
En la Biblia, nuestro Padre Celestial nos indica lo que requiere de nosotros, nos muestra con claridad la manera de agradarle y contienen muchísima información que puede beneficiarnos en gran manera y cuando andamos por las veredas de esta sabiduría descubrimos que sus caminos son prácticos y deleitosos. Por tal motivo, el apostol Pablo se expresó como indica el texto bíblico arriba consignado.
La Biblia también nos recomienda que estemos atentos escuchando la disciplina y nos hagamos sabios y que atesoremos los mandamientos de Dios, que clamemos por el mejor entendimiento y sigamos buscando el discernimiento tal como una persona buscaría valiosos tesoros esconidos.
Definitivamente las Escrituras nos proveen inspiración y orientación, nos forma para nuestra fe y práctica cristiana así como nos transforma y facilita el entendimiento de sus recomendaciones. Si tu sigues estos conejos, entenderás el temor piadoso de Dios, y encontrarás el mismísimo conocimiento. También está este otro consejo: "Ahora, oh hijos, escúchenme; sí, felices son los que guardan mis caminos mismos. Escuchen la disciplina y háganse sabios, y no muestren ningún descuido". Estimado lector, ¿estimas la Biblia a ese grado, y te esfuerzas de ese modo por aprender lo que dice?. (Proverbios 2:1 - 8:32,33)
martes, 26 de octubre de 2010 a las 17:33
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