El último trazado, Frómista-Marcilla, de 10,3 kilómetros, será realizado por la empresa ‘Comsa’ con
 La ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, aseguró en el primer tercio del pasado año durante una visita a Cantabria que la totalidad de los tramos del proyecto de la Autovía Meseta-Cantabria a su paso por Palencia estarían en obras al concluir 2005. En aquella ocasión, seis tramos (prácticamente la mitad del trazado a su paso por esta provincia) necesitaban el visto bueno del Consejo de Ministros para dotarlos financieramente, así como sus correspondientes licitaciones y finalmente sus adjudicaciones de obra.
Y aunque el anuncio de la ministra se llegó a calificar de arriesgado por la premura de los plazos, el caso es que finalmente las obras de los seis tramos que estaban pendientes ya están adjudicadas.
La última adjudicación, según pudo saber este periódico, se firmó el pasado 29 de diciembre y correspondía al tramo Frómista-Marcilla de Campos, de 10,3 kilómetros de recorrido, y que será realizado por la empresa Comsa con un presupuesto de 30,75 millones de euros y un plazo de ejecución de 33,5 meses. El Ministerio de Fomento licitó este tramo concretamente el 6 de septiembre, mediante la publicación en el BOE.
CARACTERÍSTICAS TÉCNICAS. El tramo tiene su origen al sur de la población de Frómista, en la margen izquierda de la carretera N-611. Finaliza, aproximadamente, en el punto kilométrico 48 de dicha carretera, al norte de la población de Marcilla de Campos. Transcurre de forma paralela a la actual N-611, cruzándola en dos ocasiones y las obras abarcan la construcción del llamado enlace de Frómista que dará acceso a la población. Asimismo, está prevista la construcción del viaducto sobre el Río Ucieza; viaducto sobre el Canal de Castilla; cinco pasos superiores; dos pasos inferiores; y diecinueve obras de drenaje transversal.
El tronco de la Autovía se compone de dos calzadas de 7,00 metros de anchura, en las que se alojarán dos carriles de circulación de 3,50 metros, arcenes exteriores de 2,50 metros e interiores de un metro. Tiene control total de accesos e incorpora las prescripciones establecidas en la Declaración de Impacto Ambiental.
PRESUPUESTO TOTAL. Con la adjudicación de todos los tramos pendientes -aunque hay que recordar que la Variante Noreste y el trazado entre Aguilar y el límite con Cantabria ya se encuentran a pleno servicio, se pueden hacer ya los primeros cálculos de un proyecto que nació allá por el año 1996, coincidiendo con la entrada del Partido Popular en el Gobierno Central. Se trata de una vía de Alta Capacitación que unirá en su totalidad Palencia con Santander -según las estimaciones del Ejecutivo socialista, a finales del año 2008- y que a su paso por la provincia de Palencia supone un montante global de adjudicación de obra de 346,87 millones de euros para construir 124,6 kilómetros de Autovía si se incluye la Variante Noreste de la capital y descontando además los costes de la redacción del proyecto de cada tramo, así como la asistencia técnica a las empresas constructoras y las medidas de seguridad. Para los amantes de la estadística, cada kilómetro de la A-67 a su paso por Palencia supone un coste de adjudicación de obra de 2,78 millones de euros.
EN CANTABRIA. No conviene olvidar tampoco que los 20,5 kilómetros que discurren entre las localidades cántabras de Reinosa y Molledo, con casi 220 millones de euros de presupuesto, son de los más caros que se ejecutan en España por su grado de complicación técnica y son precisamente los únicos que se encuentran aún en obras en la vertiente cántabra. El tramo Reinosa-Pesquera (8,6 kilómetros) debía haber estado concluido el pasado verano, pero lo más probable es que las obras se extiendan hasta el verano de 2006, según supo este periódico de fuentes consultadas.
Asimismo, el tramo Molledo-Pesquera, de 11,87 kilómetros, con un presupuesto de 136 millones de euros, le convierte concretamente en el segundo más caro de España con un coste de más de 12,6 millones de euros por kilómetro, y un plazo de ejecución de 42 meses. El proyecto incluye la construcción de un túnel bajo el núcleo de Somaconcha, de dos tubos paralelos de 1.538 y 1.460 metros, la de un falso túnel de unos 500 metros al oeste de la localidad de Molledo y cinco grandes viaductos. Este tramo, por las mismas vicisitudes, no estará listo hasta verano de 2007.
martes, 10 de enero de 2006 a las 0:00
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El Gobierno licita las obras del tramo Frómista-Marcilla de la A-67
El Consejo de Ministros autorizó ayer al Ministerio de Fomento a licitar las obras del tramo Frómista (Sur)-Marcilla de Campos, perteneciente a la Autovía Cantabria-Meseta, A-67, en la provincia de Palencia. El presupuesto previsto de licitación de estas obras asciende a 41,81 millones de euros.
Este tramo, de 10,3 kilómetros de longitud, forma parte del itinerario general A-67 Autovía Cantabria-Meseta, entre las ciudades de Palencia y Santander, a su paso por las poblaciones de Frómista y Marcilla de Campos. Con su construcción se evita que el tráfico de largo recorrido atraviese los núcleos de población existentes a su paso por la carretera N-611. Se incrementa, por tanto, la seguridad vial y se consigue una reducción en el tiempo de recorrido con respecto al actual itinerario.
El tramo de nuevo trazado tiene su origen al sur de la población de Frómista, en la margen izquierda de la carretera N-611. Finaliza, aproximadamente, en el punto kilométrico 48 de la citada carretera, al norte de la población de Marcilla de Campos. Discurre sensiblemente paralelo a la actual N-611, cruzándola en dos ocasiones. Las obras contemplan la construcción del llamado enlace de Frómista que dará acceso a la población. Asimismo, cabe resaltar la construcción de las siguientes estructuras y obras: viaducto sobre el Río Ucieza; viaducto sobre el Canal de Castilla; cinco pasos superiores; dos pasos inferiores; y diecinueve obras de drenaje transversal. El tronco de la Autovía se compone de dos calzadas de 7,00 metros de anchura, en las que se alojarán dos carriles de circulación de 3,50 metros, arcenes exteriores de 2,50 metros e interiores de un metro. El tramo tiene control total de accesos e incorpora las prescripciones establecidas en la Declaración de Impacto Ambiental.
Con la autorización de licitación de las obras del tramo Frómista-Marcilla por parte del Ministerio de Fomento, quedan pendientes de licitar, amén de las correspondientes adjudicaciones de obra, otros dos tramos de la Autovía de la Meseta, concretamente el tramo Villaprovedo-Herrera y el tramo Marcilla de Campos-Osorno. A. A. / PALENCIA, DP
lunes, 02 de mayo de 2005 a las 0:00
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Medicina centenaria
Muy pocas personas pueden llegar a ver pasar por delante de sus ojos 36.525 hojas del calendario, pero muchos menos pueden alcanzar los 100 años de vida con el mismo nivel de consciencia que Tiburcio Ortega Arconada, quien el pasado viernes recibió en la Diputación Provincial el homenaje de su Fundación y de las instituciones palentinas. Y no tan solo por sobrepasar el siglo de experiencia en este mundo, que ya es un mérito suficiente, sino también por toda la labor que desarrolló como médico en la provincia palentina y por ser el presidente de una fundación que intenta ayudar a los afectados de enfermedades mentales. Como diría aquél, casi nada al aparato.
Sencillo, aunque todavía algo coqueto, este delgado anciano, que aunque se mueve con cierta lentitud no necesita de ayuda alguna, asegura que su único secreto para llegar a esta centenaria edad ha sido estar ocupado. «No sé qué puede haber hecho que con esta edad esté así. Si he estado toda la vida trabajando», asegura con una sonrisa en la boca. Y es que la edad con humor es menos edad.
Nació en Marcilla de Campos, allá en 1905, «en una familia agrícola y dedicada al campo». Y en aquel pueblo logró sobreponerse a epidemias, al hambre y a la ignorancia que por entonces estaba sembrada y abonada en los campos de Castilla. La dirección que tomó su vida fue la que le dieron sus padres, lo que explica su afición por la Medicina. «Entonces eran los padres los que te mostraban un poco el camino, los que te dirigían para el futuro». Así, se vino a la capital, al antiguo colegio de San Isidoro (plaza de la Inmaculada), «donde acabé el Bachiller, e hice Medicina en Valladolid. Lo estudié allí porque era donde me correspondía por pertenecer Palencia al distrito vallisoletano». Ya entonces, pese a lo que se pueda suponer, no eran pocos los galenos que salían de la factoría de Medicina de Valladolid, como muestra una enorme orla de finales de la década de los años 20 que tiene colgada en su casa.
Y de ahí, con un termómetro y un fonendoscopio, de vuelta a su localidad natal, donde trabajó durante varios años en un sistema en el que él era el médico de cabecera, también llamado médico de Atención Pública Domiciliaria, dentro de un Distrito «en el que no podía interferir ningún otro».
Marcilla, con el anexo de Requena de Campos, fue su primer distrito, «que tenía que recorrer a pie para hacer las visitas a las casas de los vecinos», recuerda. Unos vecinos que entonces pagaban directamente a los médicos. «La cuota era de una fanega de trigo para el médico y otra para pagar al farmacéutico y cubrir los gastos en medicamentos de todo el año. Gratis teníamos que tratar a las personas de las beneficencias y a los agentes de la Guardia Civil». Y si Marcilla fue su primer destino, el último lo fue Venta de Baños de donde proviene la anécdota de que tuvo que tratar a 40 de los efectivos de la Benemérita sin llegar a cobrar un solo real.
Entre esos dos municipios, otros muchos, para los que prefiere no echar mano de su cansada memoria. Lo que no olvida, y de nuevo con una sonrisa pícara, es que él puso «la Seguridad Social en Palencia», bromea. «A los pueblos llegó en 1944», 31 años antes de que él se jubilara de su labor de médico de cabecera en 1975 .ÓSCAR HERRERO / DP
lunes, 18 de abril de 2005 a las 0:00
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