¿De qué color es la nieve?
Froilán Lózar, en su artículo (http://www.diariopalentino.es/)habla sobre una realidad vergonzosa en nuestra tierra palentina. El conoce y vive la montaña como nadie y, por eso denuncia el abandono de la gente mayor, evidente en este pueblo cuando llega la nieve, "Eso es lo que le ocurre a la gente de Celada de Roblecedo, conforme relata Jesús García en un email que remite a Diario Palentino. Gente mayor que se ve literalmente enterrada por la nieve, incapaces de traspasar los neveros de metro y medio que les conducen a la calle. ¿Cómo llegar hasta la furgoneta del pan o del pescado, que se queda a la entrada de un pueblo, castigado por las competencias que le impiden al maquinista despejar cuando menos la calle principal?. Desde la Redacción de Aguilar, Marta Redondo se hace eco de ese desamparo, tomando la palabra del vecino de Redondo, Alberto Espartero: «Hemos llamado a la Diputación y nos ha dicho que no tiene que abrir». «El ayuntamiento nos dice que el tractor no puede y la Diputación que hablemos con el Consistorio. ¿A quién acudimos?». Un habitual del foro Salvar la Montaña Palentina traslada la pregunta y la información recogida del diario digital. La vergüenza tan grande que sienten los vecinos de Salcedillo que llevan semanas desatendidos. «La pala del alcalde no actúa y nosotros estamos hartos de la actuación de las administraciones».
Pero es ahora, después de muchos años, cuando los medios de comunicación comienzan a llegar tímidamente hasta la noticia real, hasta el lugar de la noticia, hasta la Palencia alejada y profunda: «Magnífica combinación de montañas» -refleja el semanal del diario La Vanguardia; «sorpresa para el viajero en cada recoveco del camino...» afirmaba hace pocos días en El Correo una firma habitual de las secciones de montaña.
Muchas veces el hombre de la calle se pregunta: ¿dónde está el poder? ¿Quién lo ostenta? ¿Quién maneja nuestra barca? Si un procurador pide soluciones para nuestro temeroso invierno y recurre a la imaginación para exponernos la desidia que impera, quién más que él tiene el don de remover la brasa, exponiéndoles a sus señorías la angustia, el miedo, el abandono, todo lo que acompaña al temporal en esa época, sensaciones e historias por las que pasarán todos y cada uno de los habitantes de esta tierra. ¿Qué esperanza les queda a quienes están obligados a vivir bajo esas circunstancias, cuando saben que el Gobierno regional en pleno rehuyó la pregunta de uno de sus miembros, la pregunta angustiosa del representante de los excasos votos de una tierra que expira, de una tierra que muere un poco cada día, esperando soluciones y medidas?".
sábado, 17 de diciembre de 2005 a las 0:00
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