HISTORIA, ARTE Y TRADICIONES DE TORRE DEL CAMPO
XI. TORRE DEL CAMPO
1. HISTORIA DE TORRE DEL CAMPO Torre del Campo, villa jienense, ubicada a unos 11 kilómetros de la Capital, situada dentro del área Metropolitana, perteneciente a la provincia de Jaén. En el Paleolítico inferior y medio que se sitúa entre el período (350.000 a 30.000 a. C.) donde el hombre evolucionaría desde el Homo Erectus al Homo Nearderthal, representa el paso del hombre mono al hombre más parecido al actual y hay abundancia de silex, variedad de cuarzo que se encontraba en esta comarca. Este material se utilizaba para fabricar herramientas frotándolo con otras piedras e incluso con materias blandas como hueso, obteniendo un bifaz, herramienta que tenía múltiples aplicaciones aprovechando sus bordes cortantes. Las tribus beticas que habitaban estas tierras, iniciaron en fecha del siglo I a.C., un proceso de urbanización que afectó a la Betica y a Penibética, conquistados por Graco y que el geógrafo Estrabon, consideraba en vez de cives o ciudades, más bien aldeas o poblados fortificados. Los conocidos correspondientes al doblamiento betico eran: Urgavo Alba (Arjona), Villa Gaiena (Jaén), Iliturgi (Mengibar), Isturgi (Andujar) Tucci (Martos), Obulco (Porcuna) y Vergilia (Cambil). Con la llegada de los árabes el 711, Tareq ocupo toda Hispania incluso posteriormente los árabes atravesarían los Pirineos hasta que fueron derrotados en Poitiers por Carlos Martel, sobrino del Emperador Carlomagno. Es posteriormente en la Edad Media y tras la presencia musulmana,y cuando el poderío almohade alcanza su máximo apogeo tras la victoria contra el rey castellano leonés Alfonso VIII en Alarcos, en fecha 1195, cuando el monarca castellano reclama la ayuda de las milicias de la Extremadura castellana y Segovia obtiene nuevas mercedes. En fecha 25 de marzo de 1190, Alfonso VIII entrega a Segovia un total de 19 aldeas, situadas entre los ríos Tajuña y Henares correspondientes al alfoz de Alcalá de Henares: El Alameda (Olmeda de las Fuentes), Ambid (Ambite), ArKhanda (Arganda), Campo de Almiareg (Campo Real), Caravanna (Carabaña), Guexo (Valverde de Alcalá). Lueches (Loeches), Orusco, Perales, Pezola (Pezuela de las Torres), Querencia, (Ambite), Tielmes, Valdehecha (Valdilecha), Valdemoro (despoblado en el término de Torres), Valdettures (Torres de la Alameda), Valmores (despoblado en el término de Olmeda de las Fuentes), Valterra (despoblado en el término de Arganda), Vilches (despoblado en el término de Arganda), El Villar (Villar del Olmo). La razón primordial de esta cesión a Segovia es que el rey Alfonso VIII, en su labor repobladora, interviene frecuentemente en la determinación de los alfoces concediéndoles nuevas mercedes a los repobladores para qué su proximidad a los musulmanes, les motivará a trasladarse a estos lugares. Tras la victoria posterior del rey Alfonso VIII contra el Imperio almohade en las Navas de Tolosa, en 1212, el peligro musulmán se aleja de la cuenca del Tajo y es el mismo rey Alfonso VIII quien vuelve a restituir estas aldeas al Arzobispado de Toledo. Torre del Campo, es fundada a la vez que Jaén y Martos. Conquistada por el rey de Castilla y León, Fernando III, El Santo a los árabes en 1243, estuvo integrado en Jaén hasta el 1804 cuando el rey Carlos IV, le otorga la categoría de Villa. Tras la Guerra de la Independencia en el siglo XIX, fue lugar de correrías del famoso guerrillero, el Brigadier Francisco Abad Moreno El Chaleco quien dirigía su partida de patriotas y fue el azote de los invasores franceses por sus acciones bélicas en la comarca de Despeñaperros. En el año 1833, Javier de Burgos, ministro de Fomento, realiza la división administrativa del reino de España, e inscribe a Torre del Campo, dentro de la provincia de Jaén. .Las Cortes de Cádiz suprimían los Señoríos jurisdiccionales mediante el Decreto del 6 de julio de 1811, pero una vez derrotados los franceses y expulsados de España, los avatares políticos (vuelta al absolutismo) hicieron frenar las reivindicaciones de los ayuntamientos de recuperar la plena jurisdicción sobre el territorio del municipio y sería en 1834, cuando tras la introducción del régimen liberal, definitivamente queda abolido el régimen señorial. A lo largo del siglo XIX, durante la vigencia de los distintos gobiernos liberales se van a producir las desamortizaciones que es un proceso de expropiación o nacionalización de las propiedades de la Iglesia en concepto de venta de los llamadas manos muertas, nombre que recibieron las instituciones como la Iglesia y los Consejos que no podían vender sus tierras. Las Guerras Carlistas, iniciadas contra el gobierno liberal tenían a los insumisos del norte (vascos y navarros), catalanes y valencianos, todos juntos a una activa Institución, que será la Iglesia, quien avivaba desde el púlpito la sedición y rebelión contra la monarquía liberal y ésta, inició el proceso de desamortización de los bienes de la Iglesia para poder sufragar con medios económicos la formación de un ejército, dotado de pertrechos y soldados para combatir a las partidas facciosas que querían imponer por la fuerza, el régimen absoluto. En la Segunda Guerra Carlista, el pretendiente Carlos María Isidro de Borbón emprendería una la marcha dirigida por el general Gomez,jienense que recorrería toda España y llegado a Valencia prepara su entrada triunfal en Madrid y pasa por Tarancón, Fuentidueña, Villarejo de Salvanes y Perales y posteriormente acampa en Arganda del Rey. El príncipe polaco Félix de Lichnowsky, ayudante de D. Carlos y testigo de estos hechos, escribe en su memoria la entrada del Rey en Arganda: el entusiasmo con que fuimos recibidos sobrepasó el que vivimos hasta entonces. Cada uno de los nosotros era un nuevo Mesías, enviado a este pueblo que acudía en la masa disputándose el honor de alojarnos, de obsequiarnos y de servirnos. En cada casa se había preparado un festín. A las once entro el Rey en Arganda llevado por así decirlo por el pueblo, más bien que montando su caballo, a cuyas plantas se arrojaba la turba cubriendo con sus besos, las manos y los pies del Rey y humedeciéndolos con sus lágrimas de alegría. Posteriormente se suceden otros pasajes históricos como la Revolución y Constitución del 1869, el gobierno provisional del general Serrano, el reinado de Amadeo I de Saboya, la I República en 1873, período que termina con el golpe del Estado del general Pavía, quien entra con las tropas en el Congreso en 1874, seguido por el pronunciamiento militar del general Martínez Campos en Sagunto en el año 1874, imponiendo por la fuerza de las armas, la Restauración de la monarquía borbónica, en la persona de Alfonso XII. Ya en el siglo XX, se produce un cambio político, con la proclamación de la II República, he iniciada la Guerra Civil, Torre del Campo, es ocupada por el bando republicano y Jaén y su entorno son bombardeados por las fuerzas alemanas de la Legión Cóndor que tuvieron un protagonismo en estos hechos bélicos, que forman parte de historia de España. En mi libro: "La España critica. Una Iberia posible" comento esta tragedia humana y manifiesto: Desgraciadamente, la anarquía existente en las dos Españas enfrentadas, trajo, sin por ello olvidar, otras sangres inocentes derramadas, con los métodos represivos de los dos bandos, que usaron la extrema dureza. Vamos a recordar, dos víctimas de esta barbarie, la desaparición de dos personajes, que la sufrieron, en su persona, dos genios de la pluma, Federico García Lorca y Ramiro de Maeztu, inútilmente sacrificados, por el odio enfermo de los contendientes. Olvidemos para siempre esta tragedia, con su memoria histórica y sepultemos definitivamente, la triste realidad, que denunciaba Mariano José de Larra, del convulso periodo decimonónico: Aquí yace media España, murió de la otra media. Recordemos tiempos pasados, donde reinaba la armonía en el pueblo y todo el estrato social, participaba en actos colectivos como se refleja, el gran genio pictórico, Francisco de Goya, en su obra La Pradera de San Isidro con escenas de fiestas, alegría común y jolgorio popular y en otros como La carga de los mamelucos donde todo un pueblo unido, participa en su lucha contra el invasor francés. En esta escena de la Guerra de Independencia, ya un ilustrado, de mente privilegiada, D. Melchor Gaspar de Jovellanos, hacía su análisis personal y decía: España no lucha por los Borbones, ni por los Fernandos; lucha por sus propios derechos, derechos originales, sagrados, imprescriptibles, superiores e independientes de toda la familia o dinastía. España lidia por su religión, su Constitución, por su leyes, por sus costumbres, sus usos y en una palabra, por su libertad& Terminada la guerra transcurre su historia dentro del régimen de Franco hasta que en el año 1977 se incorpora como villa, tras la Ley de la Reforma Política al nuevo sistema democrático actual. Torre del Campo es un municipio fundamentalmente agrícola, dedicado al cultivo del olivar aunque ahora ha desarrollado a la vez, el sector industrial y del mueble.
2. ARTE Y TRADICIONES -Iglesia Parroquial de San Bartolomé. Es un edificio del siglo XVI, participando en el proyecto dos arquitectos: Francisco del Castillo El Viejo y Francisco del Castillo El Mozo. Son dignos de mención, la Sacristía y el Altar Mayor. En su interior, se alberga, el Cristo de la Veracruz (Siglos XVI y XVII) cuya cabeza se atribuye al escultor, Salvador de Cuellar. -Castillo del Berrueco. Esta situado en el cruce de caminos de Jaén, Arjona y Martos. Tuvo un alto valor estratégico por su asentamiento en el cerro de San Antón. La fortaleza se ubica en un saliente rocoso, destacando dos partes: la superior, delimitada por dos torres circulares y una planta cuadrada, donde están las dependencias interiores. -Torre de la Muña. Es un edificio construido entre los siglos XIV y XV,donde se conservan completamente diversas murallas y una excelente torre de planta cuadrada, edificada en mampostería que dispone en su interior, dos salas cubiertas con bóvedas apuntaladas. -Torre de la Aldehuela. Es una edificación de planta cuadrada y estructurada en dos plantas cubiertas con bóveda apuntaladas. Próximo a ella, se encuentra un viejo sistema hidráulico, usado para el riego de los campos de cultivo. -Torre Olvidada. Esta situada, en el camino que va de Jaén a Arjona y está construida sobre un antiguo asentamiento iberoromano. Ese lugar pintoresco, con vistas panorámicas excelentes, desde donde se divisan los bosques de encinas y quejidos, fuentes naturales y un gran número de especies animales. -Cerro Miguelico. Es un solar sobre un antiguo oppidium iberoromano y donde se asentó en la época musulmana, una estructura ciclópea en los siglos IX y X y luego una pequeña alquería, que será el origen de la villa de Torredelcampo. En su lado oeste, se conservan los restos de una muralla ciclópea y una necrópolis visigoda que apareció en las excavaciones arqueológicas del lugar. En el lado este del cerro, esta ubicada la ermita de Santa Ana.
Tradiciones -Feria de Santa Ana. Es una feria que se estableció desde el reinado de Isabel II desde donde podían concurrir desde toda España y de diferentes partes del mundo. Fue declarada de Interés Turístico Nacional y durante ese día, Torredelcampo es visitada por gentes de los numerosos municipios cercanos y se reúnen en el Cerro Miguelico, donde se encuentra la Ermita que alberga la Patrona. Durante todo el día, se baila, se canta y se degustan los platos típicos entre familiares y amigos en honor de la Patrona y termina con la procesión por el cerro, que se celebra el día 26 de Julio, que es la fiesta onomástica de Santa Ana.
Julio Reyes Rubio "Al-Mayriti"
jueves, 22 de marzo de 2012 a las 17:34
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