Boda de la mar y el cielo, Ángeles Garrido Garrido
La mar es la novia del cielo,
el cielo es el novio de la mar.
están mirándose constantemente
y besándose sin cesar, porque la mar
ama al cielo, y el cielo ama a la mar.
El cielo esta triste
porque la mar esta altanera,
el cielo la quiere tranquila
para poderla abrazar.
El cielo le ha regalado
una blanca nube
a su "enamorá"
para que le sirva de velo
nupcial
y sus estrellitas para que
le sirvan de corona real.
La mar le ha regalado
un ola "azulá",
un caballito de mar,
una perla y un coral.
La ola para terciarla
en el caballito,
y el cielo pueda cabalgar,
la perla y el coral
para que las luzca el cielo
cuando lleve a la mar al altar
El cielo ha invitado a las estrellas y a los luceros.
la mar a la sirenita y a los pececillos bellos
para que asistan a su boda,
esa boda tan hermosa
la boda de la mar y el cielo.
Ángeles Garrido Garrido
Enviado por ma.
jueves, 19 de marzo de 2009 a las 23:53
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Noche nublada, por Ángeles Garrido Garrido
Noche nublada
día sin resplandor
por que te llevaste
la luna y el sol.
Noche sin aroma
día sin color
por que tú te llevaste
el clavel y la violeta
del jardín de mi amor.
Me quitaste el trigo
me quitaste la avena,
me quitaste el pan
de la Noche Buena.
sólo comeré pan
de altramuces, pan
que amarga
como las tueras.
Ángeles Garrido Garrido
Enviado por ma.
jueves, 19 de marzo de 2009 a las 23:45
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Con la mirada perdida, Ángeles Garrido Garrido
Con la mirada perdida
miro hacia el océano.
Con la mirada perdida
veo ese camino obscuro
sin siluetas, sin claros.
Con la mirada perdida
veo ese camino con la
claridad del relámpago
y la silueta envuelta
en un velo blanco.
Con la mirada serena
miro el camino iluminado
y sigo viendo a la silueta
con el resplandor del relámpago.
Ángeles Garrido Garrido
Enviado por ma.
jueves, 19 de marzo de 2009 a las 23:41
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Como Juan Bautista, por Ángeles Garrido Garrido
Como Juan Bautista
te llamaste, y como el
tu sangre derramaste
"Con tu sangre
Lavaste tu cuerpo"
con las lágrimas
de los que te queríamos
se lavo tu alma
la nieve sustituyo
tu sangre
y tú quedaste
frío y blanco
como la nieve
que sustituyo
a tu sangre.
Pero el Sol
dio calor a tu cuerpo
y sigue con ese calor
aunque los años pasen.
Ángeles Garrido Garrido
Enviado por ma.
jueves, 19 de marzo de 2009 a las 23:36
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Por el mar de la vida, por Ángeles Garrido Garrido
Por el mar, de la vida
un barco va navegando
firme, orgulloso, seguro
altanero y confiado.
Pero pobre capitán, no sabe
lo que le espera, viene la galerna
que tanto teme la mar serena.
Rompe el mástil arranca las velas
y hasta la quilla quiebra, el barco hundirse
quiere, pero el capitán que ama su barco
con locura cuerda, trata de arreglarlo
como mejor puede, quiere impedir
que su barco se hunda por culpa de la
terrible galerna.
Galerna, galerna: Yo quiero
que te volvieras buena y que, este mi
arreglado barco nunca más
lo hundieras en el mar de la vida serena .
Ángeles Garrido Garrido
Enviado por ma.
jueves, 19 de marzo de 2009 a las 23:30
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