XXV Aniversario de los pregoneros
El pueblo de Benamahoma va a celebra el XXV aniversario de los pregoneros que han pasado por allí para la inaugurar sus fiesta de Moros y Cristianos. Es una ocasión más para recordar los valores de acogida, solidaridad, esfuerzo que representan su gente.
BENAMAHOMA: UN PUEBLO ABIERTO, LIBERAL Y SOBRE TODO SOLIDARIO CON TODO AQUEL QUE VAYA DE BIEN Para mí, que he participado en unos de estos pregones, es un motivo más para agradecer a este pueblo lo que en su día me transmitió de esos valores. Antonio Troya Pernia
domingo, 02 de junio de 2013 a las 10:09
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BENAMAHOMA, UN LUGAR PARA EL BUEN COMER
Dicen que los lugares que tienen una buena gastronomía son idóneos para visitarlos y probar los manjares que la naturaleza les regala. En Benamahoma hay una variada oferta de bares y restaurantes donde se puede disfrutar de un ambiente familiar y cotidiano, de una comida digna de los mejores paladares y sobre todo elaborada con productos naturales salidos de sus huertas, de ahí que en muchos lugares se conozca a este pueblo como Las Huertas de Benamahoma, por el vínculo del pueblo con sus tierras de cultivo. Así pues, siempre se puede visitar este lugar para tomarse unas buenas papas aliñás en El Bujio, unas buenas carnes a la brasa en la Tasquita Majaceite, unos deliciosos postres en el Restaurante Las Huertas, junto a la fuente de los tres chorros está el Mesón La Fuente donde sus ensaladas y carnes son una delicia, adentrandonos en el pueblo podemos disfrutar de las carnes de caza y sus variadas tapas en el Bar Gonzalez, de la comida casera en el Restaurante El Cancha, las manitas de cerdo del Bar Añoranza son una exquisitez al igual que las carnes y embutidos del Bar La Lameda... Si queremos unos buenos bocatas no deje de visitar la Panadería Casillas donde los panes de horno de leña y las famosas tortas de Benamahoma no nos dejaran indiferentes, pa copitas con tapita el Pub Mezquita. Y todo esto en un paraje de agua, cal y verde de sierra que ahora con las primeras aguas otoñales hacen de Benamahoma un destino magnifico para visitar con una variada oferta de casas rurales y de un camping a la falda de la sierra del Pinar. Un lugar paradisiaco y único en la Sierra de Cádiz.
martes, 23 de octubre de 2012 a las 0:26
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BENAMAHOMA SITIO DISTINTO
Soy un asiduo visitante a uno de los Pueblos Blancos de las Serranía de Cádiz más bonitos y entrañables que en ella existen y no es otro que Benamahoma, rememoro sus visitas periódicas desde finales de los años 70, ya ha llovido desde entonces, pero es de agraceder que la fisonomía, personalidad e idiosincrasia del pueblo y de sus habitantes sigue intacta, un lujo en los tiempo que corren. Esos paseos por el río Majaceite y su Nacimiento, ese frescor que desprende las casas blancas de cal, el aroma de chimeneas encendidas en las frías noches de invierno, esa vegetación exuberante que lo rodea y sobre todo su gentes, esa gente orgullosa y altanera de ser de donde son y a la vez acogedoras y apacibles con todos los que los visitan. No había ocasión en las que alguien del pueblo no me recomendara que acudiera cuando se celebrara la festividad más popular e importante con la que cuenta este municipio, que son las tradicionales Fiestas de Moros y Cristianos en honor a San Antonio de Padua, Patrón de la localidad, asunto que por fin el pasado año he cumplido, porque esta vez no tenía excusas para no acudir, ya que el pregonero oficial del 2009 era mi amigo Sema Miranda, el cual desde su nombramiento nos invitó a todos sus amigos a acompañarle, cosa que una gran mayoría hicimos, formando aquella noche mágica parte de alguna manera de Las Huertas. Todo lo que me contaron del tal evento se quedó exiguo, nunca imaginé unas fiestas como estas, se me escapaban a mi imaginación, casi una semana bulliciosa con toda clase de celebraciones y actividades a cuales más amenas y culturales, donde sus calles y plazas, así como la mayoría de sus habitantes forman parte del gran espectáculo apacible y visual, ofreciéndonos una gran lección de historia con mayúsculas entre dos culturas tan diferentes y distintas, como son la Cristiana y la Musulmana que durante bastante tiempo convivieron en paz y armonía por estas tierras, donde la tolerancia y compresión hizo a esta región una de las más ricas, poderosas y cultas en aquella época. Uno de los recuerdos que me viene a la mente, es la imagen que aún guardo en mi retina del Bando de los Moros coronando la elevada Atalaya preparándose para la posterior batalla, cosa que probablemente en algún momento ocurrió realmente y como no, el final con el triunfo del Bando Cristiano y la recuperación del Santo Patrón, después de unas arduas luchas y duros combates cuerpo a cuerpo, todo ello envuelto con el ruido de los disparos de los trabucos y un penetrante olor a pólvora, todo se realiza sin decorados o aderezos ya que el pueblo está siempre de por si engalanado como un genuino paraíso reino Nazarí.
Colgado de un barranco duerme mi pueblo blanco, bajo un cielo que a fuerza de no ver nunca el mar, se olvida de llorar.
Miguel Hernández
lunes, 22 de octubre de 2012 a las 21:28
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